Mugitu Mugimendua.- El viernes 28 de agosto, el movimiento Mugitu! convoca en Donostia una marcha de protesta para denunciar el “gran agujero negro” del proyecto del TAV ante el primer consejo del Gobierno Vasco que tendrá lugar en el Palacio Miramar. Con este objetivo, llevaremos a Miramar el escalofriante “agujero negro de la Y vasca” para denunciar que esta macro-infraestructura se ha convertido en el mayor agujero negro conocido que se traga presupuestos, riquezas naturales y recursos que requieren una infinidad de demandas sociales. Hacemos por ello un llamamiento a participar en esta marcha que partirá a las 11h desde el kiosko del boulevard para manifestar la oposición a este proyecto despilfarrador de recursos y destructor del territorio.

Se conjetura además que el Gobierno Vasco, en su retorno vacacional de una acelerada temporada turística, no solamente ha decidido incrementar el tamaño del agujero negro del TAV hasta el límite posible (en 2016 se van a derrochar 600M de euros en las obras de la “Y vasca”); sino que ha deliberado disparar una reacción en cadena irreversible a través de la formación masiva de “agujeros negros menores” en el territorio, imponiendo inmediatamente la Plataforma Logística de Lezo-Gaintxurizketa y el Metro bajo la playa de La Concha. Sin duda, el veloz desarrollo de estos proyectos es la condición indispensable para usurpar el debate social y la participación pública en la toma de decisiones, indicando la extrema temperatura alcanzada por la fusión de la clase política y de toda la red empresarial y financiera que la sostiene. De manera que es preciso volver a ponernos en marcha y apoyar cuantas iniciativas surjan en oposición a esas grandes infraestructuras.

Por todo ello, llamamos a participar en la marcha al Palacio Miramar porque, como dijo Einstein, los problemas no se pueden resolver desde la misma forma de pensar y de actuar  que los han creado, sino abordando un profundo cambio de principios, orientado en el caso del Gobierno Vasco a buscar lo suficiente en vez de perseguir siempre más. Es decir que se deben paralizar el TAV y los proyectos destructivos para priorizar otras necesidades sociales, como es la lucha contra la pobreza y la desigualdad, por ejemplo. ¡Ya les vale con el agujero negro del TAV!