En los últimos años la presencia de las casas de apuestas ha aumentado considerablemente en todos los rincones de Euskal Herria. Maquinas en los bares, anuncios, locales en todo el pueblo... En un contexto de crisis, además de perjudicar considerablemente nuestras condiciones de vida, la ofensiva capitalista ha sabido aprovecharse de nuestra necesidad a través de las casas de apuestas, haciendosos creer que podemos ganar grandes sumas de dinero apostando. Una herramienta muy efectiva de cara a la acumulación de capital de la burguesía.

Cuando se apuesta alguna vez se gana y otras muchas se pierde, pero en todos los casos los dueños de Reta, Codere y Kirolbet se enriquecen a tu costa. Estos funcionan como cualquier sector: reciben beneficio a través del consumo, de la extracción de la plusvalía y de las malas condiciones de los y las trabajadoras. Por otro lado las casas de apuestas utilizan diferentes trampas para garantizar esos beneficios, como por ejemplo los límites que se imponen al beneficio que se puede obtener por parte del jugador, mientras que lo que podemos perder es ilimitado.
Otro claro ejemplo es que prohíben apostar a quien gana repetidamente. La clave es que los empresarios se enriquezcan mientras que los trabajadores echamos nuestro sueldo en la maquina.

La consecuencia de estos beneficios económicos es la adicción que crea el juego. De la misma manera que las drogas crean dependencia a través de los químicos, el juego también genera dependencia. La adicción al juego es real y también sus consecuencias: desperdiciar todos tus ahorros en el juego, el sufrimiento de las familias, los perjuicios psicológicos...Se benefician de esta tragedia social sin ningún escrúpulo!

En Irun y, sobretodo, entre los jóvenes, el juego está totalmente normalizado. Todos tenemos amigos y familiares adictos al juego y conocemos las consecuencias y el sufrimiento que acarrea esta lacra. Por eso mismo creemos que ya es hora de dejar de clasificar las adicciones y de visibilizar todas las dependencias, entendiendo la función que cumplen y actuando contra esta problemática, de cara a construir un nuevo modo de vida.

Las casas de apuestas generan una confrontación social inmensa por la dimensión que han tomado y por el riesgo de dependencia, pero tenemos que situadas dentro del modo de vida capitalista. No es una problemática aislada, es una consecuencia de un problema estructural que tenemos en esta sociedad.

En el capitalismo todo el ámbito ocioso funciona como mercancía. El llamado ‘tiempo libre’, es decir, el tiempo que pasamos fuera del trabajo, está construido desde un modo de vida consumista: el poteo, el cine, la fiesta, las drogas, los locales, las plataformas de películas y series...Las casas de apuestas son parte de este modo de vida mercantilísta.

Por todo ello, empezando con la problemática del juego y de cara a entender la dimensión estructural del ocio, comenzamos la campaña que pretender visibilizar todas las dependencias y malos hábitos dentro de este modo de vida capitalista, “Bizitzaren alde. Bizitzaren jabe”, con la humildad suficiente como para reconocer la complejidad para llegar a todos y todas las trabajadoras de Irun pero con la determinación suficiente que la situación nos exige.

El que se enriquece con el sufrimiento de los y las trabajadoras nos tendrá en frente!
FUERA LAS CASAS DE APUESTAS!

Erlaitz