Tras la pantomima de apertura y vuelta al cierre de los puentes en los últimos días, queremos manifestar lo siguiente. El cierre de fronteras, las incesantes expulsiones y los controles racistas vulneran los derechos humanos, los derechos de las personas migrantes y los tratados firmados por los propios Estados. Provocan muertos.

Esta situación ha supuesto la muerte de 9 personas en Bidasoaldea. No han sido sucesos desgraciados, esas muertes podían evitarse. Insistimos. Las políticas migratorias racistas aplicadas por la Unión Europea y los Estados francés y español son responsables directo.

En Bidasoaldea se arrebata todos los derechos a las personas migrantes. Libertad de circulación, derecho a viajar de forma segura, acogida digna; han militarizando la zona, obstaculizado los pasos de frontera.

También condicionan la vida de quienes vivimos en este territorio. Exigimos a los Estados y a las instituciones que nos gobiernan que trabajen para poner fin a una situación de violación de derechos y control permanente:

Necesitamos:

1. Libertad de circulación y vías seguras para todas las personas:

   Solicitamos la apertura definitiva de los puentes. La representación de los días pasados ha sido vergonzosa.

   Desde 2020 la comarca del Bidasoa es una zona controlada y militarizada.

   Recientemente hemos sabido que este verano se utilizarán drones para la caza de personas. Los derechos humanos de las personas migrantes son constantemente vulnerados por los Estados francés y español. Pero nuestros pueblos son pueblos de acogida.

   El pasado 1 de noviembre, representantes de entindades, asociaciones, sindicatos y partidos, abrimos el puente peatonal para denunciar el absurdo de la situación. El teatro de esta semana ha demostrado que no vamos a conseguir nada por separado. Por lo tanto, es urgente, que la sociedad y representantes de todos los partidos políticos comiencen a trabajar juntas para acabar con estas políticas migratorias racistas y asesinas.

   Los derechos de las personas migrantes son también nuestros derechos nuestros. Los Estados vulneran los derechos de las personas más vulnerables y las y los habitantes del territorio. Infringen las leyes que ellos mismos han aprobado. No vamos a cejar en nuestro empeño.

2. La solidaridad no es delito: al acoso de las personas migrantes se añade el acoso de las y los miembros de las asociaciones solidarias. Pero el estado francés reconoció por ley que la solidaridad no es delito. Vuelven a ignorar sus propias normas.
   
   

Por todo ello, las asociaciones aquí reunidas llamamos a una convocatoria para el próximo 22 de julio y convocamos a la ciudadanía y a las y los cargos electos políticos de Bidasoaldea para exigir la apertura de frontera.

Bidasoa-Etorkinekin, Irungo Harrera Sarea, Diakité-Etorkinekin federazioa, Ongi Etorri rrefuxiatuak, Bagera-Nous Sommes, SOS Racismo, BIZI, LAB, FSU y Solidaires, Les Vertes,Parti Anticapitaliste eta EH Bild

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