Iñigo, nunca te olvidarán

Fotografía: Asier Jaraiz

Publicado originalmente en euskera. Ver abajo.

La actuación de Iñigo Muguruza tuvo lugar en Itsas Etxea. Los Discípulos de Iñigo, Bel y Matah llenaron la sala.

Iñigo Muguruza fue homenajeado ayer, celebrando su cumpleaños. La Casa del Mar se llenó de música, entre aplausos, risas y lágrimas. Allí estaban los amigos de los Muguruza, así como sus familiares y compañeros. Las puertas se abrieron a las 19:00 y poco a poco la sala comenzó a llenarse. Más que escuchar música, la gente se acercó a reunirse. A las 19:30 horas comenzó la tarde con los Discípulos de Iñigo. El grupo formado por antiguos y antiguas alumnas de Iñigo Muguruza cantaron versiones de diferentes grupos del músico irundarra, homenajeando a su profesor y poniendo en práctica lo que él les ha enseñado. Todos y todas juntas cantaron Presaka, Kunbia en Sol Menor o Miguelón, del grupo de Anti Régimen, cantando La línea del frente, probablemente muchos recordaban sus épocas juveniles. El oiartzuarra Bengo mostró sus movimientos de break dance junto a los discípulos.

Fermín tomó la palabra después, antes de que comenzaran los dos grandes conciertos del proyecto. Recordó a su hermano y agradeció a todos y todas las presentes. Presentó a Bele, un proyecto liderado por Lide Hernando, y el grupo apareció en el escenario. Itsas Etxea fue invadida por dancehall y disco, y la gente se fue animando poco a poco, moviendo las piernas y siguiendo los ritmos. Al final del concierto Itsas Etxea era una sala de baile. Hernando ha reivindicado que se puede hacer cualquier tipo de música en euskera, y lo demostró muy bien entre los aplausos de la gente.

Sonidos reggae

Para terminar, Matah y Chalart 58. Reggae y Dub. Los subwoofers de Itsas Etxea fueron puestos a trabajar con la fuerza de los bajos. El músico catalán ofreció una actuación excitante, y al final el DJ Chalart cerró el cumpleaños de Iñigo con canciones bailables caribeñas. Fermín y amigos y amigas subieron al escenario para terminar la celebración y bailar juntas. La gente salió conmovida de Itsas Etxea, dándole a Iñigo el merecido día.

Publicado originalmente en euskera en bidasoa.hitza.eus.

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