El audiovisual elaborado por el grupo cultural La ilusión aborda y muestra el tema de los vascos deportados a los campos de concentración nazis: la vida de María Josefa Sanzberro Etxeberria.
Durante la Segunda Guerra Mundial, Sanzberro fue una mujer comprometida con la resistencia francesa. Oiartzuarra de nacimiento, en 1919, cruzando con su familia el Bidasoa, se trasladó a vivir a Senpere "en busca de una nueva vida" -décadas después, con la victoria de Franco y la derrota de la República, miles de vascos tuvieron que abandonar el exilio, todos ellos cruzando la frontera francesa por el mismo camino que Sanzberro-. Allí se casó en 1938 con Pierre Nicolás, propietario del hotel Collado de San Ignacio, situado en el Collado de Santinazio, del que era empleada Sanzberro. También se puede ver en el documental, cuando los nazis alemanes invadieron Francia en 1940 (junto a Bélgica y Holanda), llegaron a Sara (se instalaron en el Collado de Santinazio, en la frontera con Navarra), junto a la posada de María Josefa.
Resistencia como miembro de redes
A medida que avanzan las imágenes, una voz en off cuenta luego cómo María Josefa, junto a su hijastra Marie-Jeanne, participó en varias redes de resistencia en 1940. Actuó en Democratie, Cométe, ORA, Tartane-Masséna y Nivelle de Bidasoa. Añade que su cometido fue transmitir información a los aliados, darles alojamiento, y ocultar documentos en un gallinero.
Se dedicó a estas tareas, hasta que fue detenida en 1944. El audiovisual relata que fue interceptada a raíz de una denuncia de una funcionaria del Ayuntamiento de Sara. Así la llevaron primero a Hendaia junto a su hijastra y a Fort du Hâ, después a Burdeos. Desde allí fueron trasladadas al campo de concentración alemán de Dachau y, posteriormente a la de las mujeres de Ravensbrück, el 30 de agosto de 1944.
El documental explica que las dos familiares fueron separadas y que Sanzberro fue objeto de trabajos externos como carga y descarga. Sanzberro se dio a la fuga mientras realizaba estos trabajos adaptados, pero en septiembre del mismo año fue interceptada de nuevo y trasladada al citado campo de concentración. Como consecuencia de su huida, sin embargo, fue trasladada como castigo al campo de concentración de Sachsenhausen. Allí murió el 13 de noviembre de 1944.