Movimiento Pensionista de Euskal Herria.- Tras la ratificación en el Congreso del RDL 2/2023 de 16 de marzo de medidas urgentes para la ampliación de los derechos de los pensionistas, la reducción de la brecha de género y el establecimiento de un nuevo marco de sostenibilidad del sistema público de pensiones tenemos que decir que es demasiado título para tan escaso contenido.

Aunque el RDL incorpora ciertas mejoras, es parte de un proceso de reformas que está recortando pensiones y derechos de las personas pensionistas. Reformas que como la del 2011 deberían haber sido derogadas y que en este RDL se perpetúan.

El acuerdo alcanzado con los sindicatos de la Mesa de Diálogo Social y la Comisión del Pacto de Toledo no ha modificado sustancialmente el borrador inicial del Gobierno.

La valoración que realizamos desde el MPEH la hacemos en función del grado de cumplimiento, mediante las medidas adoptadas, de nuestras demandas más significativas.

Aunque es positivo el incremento de las pensiones mínimas este incremento es raquítico y no alcanza ni siquiera los 1080. Nos referimos a una persona pensionista mayor de 65 años, CON CÓNYUGE NO A CARGO, que según la tabla del gobierno pasaría de 743 euros en 2023 a 873 euros en 2027 tras aplicar en dicho año 2027 el 60% de la renta mediana tal como dictamina el RDL.

Rechazamos que se sustituya la referencia al SMI del 60% del salario medio por el umbral de la pobreza o renta mediana ya que supone una pensión mínima menor.

De aplicarse hoy el primer criterio de referencia a un SMI del 60% del salario medio el resultado sería 1.126 euros de pensión mínima y no los 873 euros resultantes de aplicar el 60% de la renta mediana. Con el salario medio de la CAV la pensión mínima serían 1.230 euros y con el de Navarra serían 1192 euros de pensión mínima.

No damos la batalla por perdida e instamos al gobierno y partidos políticos a aprovechar la tramitación parlamentaria para establecer de inmediato, en 2023 y con efectos retroactivos a enero la pensión mínima de la persona pensionista en 1080 euros y en catorce pagas.

Reclamamos una mejora sustancial de la pensión mínima no contributiva individual que tendrá como referencia multiplicar por 0,75 el umbral de la pobreza de un hogar unipersonal cada año hasta 2027, por lo que pasaría de los 484 euros en 2023 a los 510 euros para 2024.

Rechazamos que se aumente de 25 a 29 años el periodo de cálculo de la pensión. Ni 25, ni 29, ni 30, el MPEH reclamamos que el periodo de cálculo de la pensión se sitúe en los 15 mejores años cotizados.

Mejorar la compensación de los vacíos de cotización es necesario, aunque la propuesta ni siquiera vuelve a la situación anterior al 2011 y crear el complemento de brecha de género que incrementa para el año 2024 y 2025 un 10% la prestación por hijos/as, las consideramos insuficientes y deberían en cualquier caso aplicarse con carácter retroactivo.

Es positivo incrementar los ingresos del sistema aunque las propuestas son insuficientes, y desde el MPEH insistimos que la mejor garantía del Sistema Público de Pensiones reside en la creación de empleo de calidad, la recuperación del poder adquisitivo de los salarios, la reducción del tiempo de trabajo sin merma del salario para crear más empleo y el establecimiento de un SMI del 60% del Salario Medio recogido en la Carta Social Europea. Esta es la mejor manera de asegurar el SPP mediante el incremento de ingresos debido a las cotizaciones. Como podemos ver en el cuadro adjunto la diferencia salarial con los países de nuestro entorno es inaceptable y este es el problema.

Cuadro estadístico salarios medios y mínimos Año 2022

SALARIO MEDIO: euros brutos mes 14 pagas

• 10 principales economías europeas 3.028
• Estado español 2.086
• Comunidad Autónoma del País Vasco 2.278
• Navarra 2.209
  
  

SALARIO MÍNIMO: euros brutos mes 12 pagas

• 10 principales economías de la UE 1.417
• Estado español 1.260
  
  

No se puede decir que este RDL no tiene recortes.

Los recortes en las pensiones que todavía no se han completado procedentes de esta reforma como el aumento de la edad de jubilación de 65 a 67 años o el incremento de años cotizados para acceder al 100% de la pensión se siguen cumpliendo y se ratifican recortes como el incremento de los años de cotización necesarios para el cálculo de la pensión de 15 a 25 años, que con este RDL se aumentan a 29.

Someter, tal como aparece en la propuesta de reforma, las decisiones futuras respecto a la financiación y prestaciones del SPP a los criterios del Informe de envejecimiento publicado por la Comisión Europea, la AlReF y el Pacto de Toledo deja la puerta abierta a nuevos recortes de las pensiones. Es imprescindible asegurar que los presupuestos del estado cubrirán los posibles déficits.

Esta no es la reforma que desde hace más de cinco años venimos reclamando en las calles y vamos a continuar nuestra lucha para que reivindicaciones básicas como pensión mínima de 1080 euros, paga compensatoria anual por la pérdida del poder adquisitivo de las pensiones, 100% pensión de viudedad y derogación de los recortes de la reforma 2011 sean incluidos en la tramitación parlamentaria.

Gobierne quien gobierne las pensiones se defienden