Ainhoa Sagarzazu.- La crisis climática en la que estamos inmersas amenaza con destruir la biodiversidad esencial para la vida, así como la tierra, el aire y el agua, sin los cuales la supervivencia es imposible. Ante esto, los países europeos dirigen sus esfuerzos y recursos hacia la descarbonización. Pero el ayuntamiento de Irun, en lugar de ir en la misma dirección, tala tilos protegidos anteriormente por el mismo consistorio. También un magnífico liquidambar de Larreaundi ha dejado de ser hogar de cientos de aves porque lo ha talado el ayuntamiento. ¿Negligencia o ignorancia? Por si es falta de saber, hagamos pedagogía otra vez.